Opciones para tratar el pie de atleta
Todos los que sufren de pie de atleta pueden acudir a dos diferentes especialistas, el dermatólogo y el podiatra o podólogo. Como esta afección comienza con erupciones y enrojecimiento de la piel, es normal que el dermatólogo pueda revisar las irregularidades, identificar la enfermedad y sugerir curas para esa condición. El podiatra, por su parte, puede hacer una mejor evaluación ya que los pies son su área específica de trabajo.
Muchas veces la enfermedad se puede identificar a la vista, pero en otras ocasiones puede ser necesario tomar una muestra del tejido afectado para examinarlo con mayor precisión. Cuando ocurre la afección, la prescripción de medicinas contra hongos de la piel, tanto para aplicaciones de tópicos en las áreas afectadas o para su consumo vía oral, representando la primera etapa del tratamiento. Así mismo, existirán planes específicos de tratamiento dependiendo de la gravedad de la situación. Estos tratamientos pueden ser de corta duración o extenderse según la gravedad de cada caso, y las dosis iniciales ajustadas de acuerdo a los resultados que se vayan obteniendo. Si luego del examen de las muestras, la causa de la afección es por bacterias en lugar de hongos, el tratamiento tiene que ser a base de antibióticos específicos.
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Lo más importante es acudir al médico tan pronto aparecen los síntomas, porque el pie de atleta que no se trata a tiempo puede esparcirse a otras partes del cuerpo, e incluso puede pasar a otras personas que entren en contacto con las áreas afectadas. Como medidas preventivas, practique la limpieza y pulcritud en todo lo que haga y evitará la diseminación de hongos y bacterias.