¿Insomnio? 7 Formas de enfrentarlo

Por Carla Casanova

Fatiga, cansancio, rabia, tristeza, y unas oscuras ojeras son tan solo lo más visible de las terribles “noches en vela” por las que todos hemos pasado alguna vez. Las razones más comunes del insomnio son:

• Preocupación
• Ansiedad
• Depresión
• Estrés
• Descontrol del horario habitual del sueño

El insomnio puede llegar a ser un problema grave que, de no tratarse, afectará otros ámbitos de nuestras vidas.

Bien son conocidos los distintos fármacos para ayudar a conciliar el sueño, pero también son conocidos sus efectos secundarios en la salud, por ello, antes de que tengas que acudir a un médico especialista o tomar medicinas para poder dormir, puedes probar con estos sencillos consejos para que Morfeo te reciba en sus brazos.

-Ponle horario a la preocupación: Si tu falta de sueño es por algún asunto que no sale de tu cabeza, es momento de buscar soluciones, opciones para hacerlo o simplemente, si la solución requiere espera o no existe, que no sea la hora de dormir la que dediques a pensar en ello. Las horas previas al descanso nocturno deben propiciar la calma y distensión. ¡Aprovecha el resto del día para ocuparte de los problemas!

-Haz ejercicios: Es uno de los mayores estimulantes para conciliar el sueño. No necesitas entregarte horas y horas a un gimnasio. Puedes empezar saliendo a caminar o trotar, practicando ejercicios caseros en la comodidad de tu hogar, optando por alternativas como la bailoterapia o subir alguna montaña.

-Retoma hábitos de sueño: Intenta acostarte y levantarte a la misma hora. Evita siestas mayores a 30 minutos y procura terminar tus actividades laborales o que requieran contactos con aparatos electrónicos al menos una hora antes de irte a dormir.

-Toma té: Evita tomar café o bebidas achocolatadas al finalizar la tarde. El té es una gran opción para conciliar el sueño de forma natural sin tener que contar ovejas. La valeriana, tilo, manzanilla o amapola son los más efectivos. Igualmente es importante que te mantengas hidratado durante el día y mantengas una alimentación balanceada.

-Medita y relájate: Puede ser la gran aliada para volver a disfrutar de las noches de total descanso. Practicar yoga o cualquier actividad relacionada a la meditación ayudará a nuestro cerebro a prepararse para las noches en calma.

-Sol, algo de sol: Mantén contacto con el sol cada día al menos unos minutos. Otra opción es que tu habitación se mantenga bastante iluminada por el día, pero viceversa en la noche.

-Haz un ritual: Prepararnos para dormir es muy importante y cada uno, según su personalidad y actividades diarias puede descubrir cuál es el mejor ritual para ir a la cama. Un baño con agua caliente o agua fría, escuchar música, hacer ejercicios de respiración o meditación, leer, entre otras. Un dato clave es que a la hora de dormir tengamos nuestra habitación ordenada, limpia y fresca.

Lo más importante: ¡La cama es para dormir y tener sexo! Es tu espacio íntimo para descansar y disfrutar. Dile no a la comida en la cama, y sobre todo a realizar cosas de trabajo sobre ella.

¡Feliz noche!