5 Factores a evaluar en tu oficina para la buena salud
Además de alimentarte y dormir bien, practicar algún ejercicio y siempre chequearte con tu médico de cabecera por alguna novedad, tu espacio de trabajo debe contribuir a mantener tu estado de salud en las mejores condiciones, pues, además de un deber de quienes te contrataron, es indispensable que tu cuerpo y mente trabajen al 100 x 100 para que puedas cumplir con todas tus metas. Y si es el caso de que eres tu propio jefe, con más razón debes propiciar un ambiente óptimo.
¿Cómo es tu oficina? ¿tu espacio de trabajo? ¿tu horario laboral? Es momento que hagas una breve evaluación de estos aspectos y que mañana cuando regreses a ese espacio en el que pasas horas, lo conviertas en un lugar que contribuya a tu buena salud. ¿Con qué deberíamos contar?
1.-Con la oportunidad de parar después de cada tarea: Es indispensable que nos tomemos unos minutos de descanso luego de cada actividad laboral que cumplimos. Ese tiempo lo pedemos dedicar a estirarnos, caminar, sentarnos en el caso de que nuestro trabajo se desarrolle la mayor parte de tiempo de pie, comer algo, distraernos con algo que no se relacione a el empleo. Estos lapsos de descanso y distracción benefician nuestro cerebro y nuestro ritmo de productividad.
Anuncio
2.-Con momentos de interacción con el equipo: Si compartimos nuestro empleo con equipos de varias personas, es fundamental que tengamos momentos para interactuar con ellos. Esas oficinas en las que nada más se dan los "buenos días" y los "hasta mañana" y cada quien entra en su ordenador sin mediar más palabra, no ayudan al fortalecimiento y trabajo en equipo. Tu oficina debería propiciar espacios de encuentro, puede ser a la hora del almuerzo, la merienda, reuniones de planificación semanal, momentos para compartir semanal o mensualmente como cumpleaños, cumplimiento de metas, etc.
3.-Diseño funcional y materiales adecuados: Aunque esto suena obvio, muchas oficinas no ofrecen los espacios indicados para sus empleados o peor aun, no ofrecen materiales de calidad para su desempeño. Por ejemplo, en una oficina básica, cada uno debe contar con un escritorio, un ordenador, papelería básica; un espacio cómodo, una silla de oficina, etc. Cuando no contamos con espacio suficiente o lo que tenemos para trabajar resulta incómodo, no rendiremos y podemos terminar con unos cuantos problemas de postura, alergias y demás.
4.-Iluminación: Esta característica suele pasarse por alto, y es una de las más importantes para tu mejor desempeño. Necesitamos un espacio bien iluminado, tanto con luz natural como artificial. Sí, ventanas y luces, todo en su justa medida. Nuestro cerebro y ojitos lo agradecerán enormemente.
5.-Espacios informales: Un comedor para almorzar y merendar, una sala de estar, un salón de juegos, una biblioteca, un jardín... Puede ser un espacio que se adapte a la necesidad de la mayoría del equipo. Pero debe existir un espacio que motive al descanso, a contribuir a las relaciones interpersonales del equipo, a la desconexión de la rutina. Esto ayudará increíblemente a la productividad de todos.
Anuncio
Te aseguramos que cuidando estos aspectos, estarás aportando a tu salud, tanto física como mental, y con ello, contribuyendo a tu productividad y desempeño profesional. ¿Qué opinas?