Puertas de Madrid II: La puerta de Alcalá
Acompaño a mi sombra por la avenida
mis pasos se pierden entre tanta gente
busco una Puerta, una salida
donde convivan pasado y presente.
De pronto me paro, alguien me observa
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levanto la vista y me encuentro con ella.
Ah! y ahí está, y ahí está
Ahí está, ahí está
viendo pasar el tiempo, la Puerta de Alcalá.
Ana Belén y Víctor Manuel la clavaron en los años de la Movida Madrileña con esta canción que hace homenaje a uno de los puntos más emblemáticos de la capital española.
En la Puerta de Alcalá se encuentra eso que cuenta la pieza musical, el pasado de un Retiro que sirve de pulmón vegetal y un colirio para los ojos de los madrileños, y que se conserva como esa casita de campo de la monarquía española que un día fue; y un punto de encuentro de la llamada milla de oro de Madrid, en plena rotonda de La Independencia.
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Miles de turistas se toman la foto a diario durante el resquicio que les deja el cambio de luz de alguno de los semáforos de las calles de Alcalá, Alfonso XII, Serrano o Salustiano Olózaga.
Aquellos que toman el autobús exprés desde el aeropuerto se impresionan al ver esta estructura de piedra erigida por el Rey Carlos III, para sustituir la puerta antigua que recibía a los visitantes de Francia y Aragón.
Una mañana fría llegó
Carlos III con aire insigne
y se quitó el sombrero muy lentamente
bajó de su caballo
con voz profunda le dijo a su lacayo:
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ahí está, la Puerta de Alcalá.
Ahí está, ahí está
viendo pasar el tiempo la Puerta de Alcalá.
El monumento se construyó bajo un estilo neoclásico en 1778, de aquellas, en los límites de la ciudad. Hoy continúa siendo uno de los puntos más característicos del centro de la Villa y Corte. Además de la canción que le han compuesto, su peculiaridad consiste en ser el primer arco de triunfo construido en Europa tras la caída del Imperio romano, siendo precursor de otros como el Arco de Triunfo de París y la Puerta de Brandeburgo en Berlín.
Desde el siglo XVIII a la era de la tecnología, la Puerta ha sido testigo de muchas de los episodios que han cambiado el curso de la historia española, y por qué no, de la historia mundial. “Viendo pasar el tiempo”, la este portal ha sido testigo del paso de “esas milicias que resisten bajo el “no pasarán” de la Guerra Civil, de la manifestación de los “200 estudiantes inician la revuelta, en los años 60” o del “travesti perdido” en la época de la Movida Madrileña del que nos habla la canción.
Hoy no se ven tales cosas. Bueno, quizás en el World Pride 2017, cuando la Puerta de Alcalá fue uno de los protagonistas al albergar una de las tarimas, mucha diversidad llenó de color la rotonda. Pero en el día a día, se disfruta del paisaje que ofrecen las terrazas donde ejecutivos y turistas degustan las maravillas de la cocina española, y de los cientos de visitantes se dejan seducir por el monumento ornamentado con alegorías a las cuatro virtudes principales: Prudencia, Justicia, Templanza y Fortaleza.
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¿Conoces la Puerta de Alcalá?
