Los ladrillos y la materia orgánica
Los ladrillos utilizados en construcción se elaboran a base de material arcilloso, al cual se le incorpora una pequeña cantidad de material orgánico, alrededor de 2% en base a volumen, comunicándole ciertas características favorables al ladrillo ya preparado, durante el período de secado. Esa pequeña cantidad de material orgánico permite que después del proceso de calcinación del ladrillo a altas temperaturas, obtengan la porosidad adecuada en el producto final.
En muchos países utilizan como fuente de material orgánico pulpa de papel o cáscara de arroz, que son productos de comprobada eficacia en la industria alfarera. Sin embargo, ante lo elevado de los precios y la baja oferta de la pulpa de papel, y la producción estacional de la cáscara de arroz que además tiene el inconveniente de producirse lejos de las alfarerías, representando un significativo incremento en el costo debido a los fletes que se deben pagar, permanentemente se están evaluando nuevos materiales que se pudieran utilizar con este fin.
En Argentina, por medio del Centro de Tecnología de Recursos Minerales y Cerámica (CETMIC), tienen un equipo de investigación evaluando las propiedades de materiales que pudieran utilizarse en la producción de ladrillos y su posterior comportamiento. La materia orgánica que tradicionalmente se ha utilizado en alfarería, puede ser reemplazada por otra siempre y cuando no se afecten las propiedades esperadas del producto final. Ahora están evaluando el uso de bagazo de cebada, proveniente de las industrias cerveceras.
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La alimentación animal, especialmente en los sistemas estabulados o Feed Lots, consume diversos subproductos industriales, de origen orgánico, para incorporarlos en sus raciones. Es muy común el uso de tortas o bagazos de la industria extractora de aceites vegetales o de las industrias frutícolas, pero también utilizan bagazo de la industria cervecera, que en el país sureño representa un 20% del total anual producido. Al resto de bagazo de cebada, 80%, se le busca uso, y ya las pruebas de laboratorio indican que este producto se pudiera incorporar en la producción de ladrillos, para lo cual solo faltan las pruebas a nivel industrial en una alfarería.
