Venta de ropa usada – Una idea de negocios rentable
El concepto de reusar la ropa está en boga y los cazadores del estilo vintage lo hacen tendencia. En países de Europa, Estados Unidos y Canadá, amantes de la conservación del ambiente, de las tres “R” (Reciclar, Reducir y Reusar) y de bajar los niveles de generación de basura, han optado por combinar el concepto de comprar cosas usadas y mantener estilos a la moda. A la ropa usada la llaman ropa “con historia”, “con carácter”, definición que atrae la curiosidad de sus compradores. Latinoamérica observa y aprende de esta tendencia y en todo el continente ya se pueden encontrar tiendas que ofrezcan la opción.
Incursionar en la venta de ropa vintage puede ser un buen negocio para los emprendedores. El concepto de las tiendas a consignación y de artículos de segunda mano tienen un movimiento cada vez mayor. La idea es una opción excelente para los que disfrutan de la moda, de la mercadotecnia y de las ventas. El mercado de ropa y otros artículos de segunda mano es amplio, y podría ser un buen generador de ingresos para los dueños y una opción para los fashionistas en tiempos difíciles.
Para los curiosos de la idea, se presentan algunos pasos para incursionar e iniciar el negocio
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¿Cómo iniciar el negocio?
Elegir la ubicación. Puede ser una tienda minorista, un puesto en el mercado de pulgas, mercadolibre.com o un bazar temático. El lugar será crucial para garantizar el desarrollo de la propuesta.
Decidir cómo conseguir la ropa
- Por consignación: la gente trae la ropa bajo una política donde se explica el tipo de ropa que se recibe, condiciones de las prendas de vestir y los porcentajes que se entregaran luego de la venta.
- Por compra directa: Ventas de garaje o jardín; liquidaciones de patrimonio, eBay, tiendas de excedentes y otras tiendas de segunda mano.
Determinar el público objetivo. Para compradores de ropa de diseñador; prendas de vestir de mujer, hombre o niños; ropa antigua, etc.
Averiguar qué licencias y permisos se requieren para abrir la tienda de ropa de segunda mano, incluyendo cómo registrarla legalmente.
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Hacer el inventario del equipo y suministros requeridos: exhibidores, colgadores, estanterías, maniquís, probadores, etiquetas para la ropa, bolsas de compra y una forma amigable de recibir los pagos.
Planificar la promoción de la tienda y elegir qué tipo de publicidad es la más adecuada para el público objetivo: panfletos, página web, publicidad radial, anuncios en el periódico local, etc. También se pueden organizar desfiles de moda, eventos caritativos y una gran ceremonia de apertura.
Referencias