Aunque la mayoría de películas basadas en viajes memorables siempre muestran la transformación de una persona al decidir emprender camino, no siempre tiene que ser así; porque viajes hay para todos los gustos y muchas veces ocurren de la manera más inesperada, guiados por un problema familiar, por seguir la invitación de un amigo o por necesitar un poco de encierro.