El Taj Mahal, una historia de amor

Por Mi Gelatina

Generalmente, cuando se hace referencia al majestuoso Taj Mahal, se comienza por exaltar su infraestructura única, sus características arquitectónicas, los materiales utilizados en su construcción, sus jardines y toda su estructura y ornato exterior con incrustaciones de mármol, jade y cuarzo de colores; y su decoración interior con incrustaciones de gemas preciosas y semipreciosas.

Este mausoleo se construyó como un monumento funerario a orillas del Río Yamuna en la ciudad de Agra, India, y es un conjunto de edificaciones bordeadas por una muralla y ocupando cerca de 17 hectáreas de terreno donde se incluyen además una gran mezquita, una casa de invitados y sus amplios jardines.

Mezquita

El período de construcción fue de 22 años y se utilizó mayormente mármol blanco para sus paredes, el cual fue traído desde las canteras de Makrana a unos 300 kilómetros de distancia. El segundo material, por la cantidad utilizada, es la arenisca roja, piedra que se utilizó en combinación con mármol negro para las murallas, la entrada principal y la mezquita. Se incluye además jade y cristal traídos de China, lapislázuli de Afganistán, turquesas del Tibet, ágata de Yemen, zafiros de Ceylán, amatistas de Persia, crisolita de Egipto, cuarzo del Himalaya, coral de Arabia y otros materiales especiales para la construcción y la decoración.

Entrada estilo medieval

Toda esa riqueza está en este monumento, sin embargo, una historia de amor rodea toda la creación del Taj Mahal, que significa “Corona del Palacio”, ya que se construyó entre los años 1631 y 1654, por el emperador Shah Jahan como un mausoleo para su esposa favorita. Cuando este emperador era el príncipe Shahbuddin Mohammed, muy educado y de una ilimitada riqueza, se enamoró de la princesa Arjumand Mumtaz Mahal, hija del primer ministro de la corte y de 15 años de edad. Cinco años después se realizó la boda, y esta princesa pasó a ser la esposa favorita del príncipe, que posteriormente fue coronado como Shah Jahan. Esta esposa le dio al emperador catorce hijos, pero falleció después del último parto significando una amarga tragedia para el monarca. Moribunda, la ahora reina, pidió a su rey que en su memoria construyera un monumento inigualable en el mundo.

Obedeciendo la última voluntad de su esposa, el rey contrató unos 20.000 obreros y los mejores arquitectos para construir el Taj Mahal, cuyo nombre también fue en honor a la reina Mumtaz-i Mahal, cuyo nombre significa “Perla del Palacio”, y Taj Mahal significa “Corona del Palacio” como una manera de ofrecer a su difunta esposa un palacio y una corona. El Taj Mahal está considerado como una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno.