Naturaleza por explorar en Paraguay

Naturaleza por explorar en Paraguay

De los países latinoamericanos es Paraguay el que menos ruido hace en agencias de viajes, sin embargo en los últimos 10 años las tasas de crecimiento del país lograron nivelarse con países lejanos de Arabia Saudita, despertando así la atención de viajeros curiosos, mochileros y turistas de regiones locales.

Ser un país de unos seis millones de habitantes no lo coloca en desventaja frente a otros que superan los 20 millones y albergan metrópolis cosmopolitas, muy llamativas para visitantes exigentes que piensan más en lujos y suites de hoteles ostentosas que en un contacto cara a cara con el destino elegido.

Si tu opción es la segunda y te animas a explorar la región paraguaya tenemos excelentes noticias para ti. La primera es que casi la totalidad del país está rodeado de áreas boscosas, con afluentes muy caudalosos y una fauna y flora diversa, ideal para viajeros amantes de la ecología. La segunda es que estas regiones gozan de protección ambiental y algunas de ellas están custodiadas por etnias, quienes al igual que el 70% de la población habla guaraní, lengua oficial del país suramericano. ¿Estás preparado para una aventura silvestre y mística?

Créenos que Paraguay lo vale.

Dunas mágicas

Al sur de la provincia Itapúa están las dunas San Cosme y Damián, una maravilla natural con el monte Ybycuí en el centro y las aguas del río Paraná en los bordes.

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Aunque se han visto varias veces amenazadas por la corriente fluvial, la arena insiste en quedarse gracias al empeño de la gente y de las autoridades públicas que han hecho esfuerzos en conservar este milagro de la naturaleza.

Para llegar a éstas se debe tomar una embarcación y tras navegar una hora sobre el río accederás a un lugar único en la geografía paraguaya, libre de tecnologías y comercios. Un destino perfecto para conectarse contigo mismo y con la naturaleza.

Humedales sin fronteras

La región de pantanales de Paraguay se ubica sobre la parte más norte del país y se encuentra con vecinos como Bolivia y Brasil para conformar un triángulo fluvial en el que las fronteras son más ficticias que reales.

Para algunos se trata del sistema de humedales más abundante del mundo, es común que se produzcan crecidas que dejen todo el lugar bajo aguas, pero al bajar los niveles se descubre una naturaleza habitada por aves, peces, reptiles y mamíferos. Es tanta su grandeza que cubre 15.000 km del río Paraguay, siendo un hábitat rico para el estudio de ecosistemas naturales y la observación de fauna silvestre como yacarés, boas, nutrias, iguanas, ardillas y otras especies.

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Es posible recorrer la región a través de safaris fotográficos y paseos organizados por cooperativas y agencias comunitarias.

Laguna dulce y cristalina

San Pedro es el segundo distrito en importancia de Paraguay y aquí se encuentra el único lago del país que goza de estar sobre arenas muy blancas, característica que da el nombre a este parque natural perfectamente conservado. La transparencia de sus aguas habla por ellas mismas.

Son 147 hectáreas de agua sobre arena, en las que sus visitantes pueden practicar buceo o bañarse bajo la sombra de sus palmeras.

El chaco silvestre

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El gran Chaco paraguayo es una región de importancia altamente histórica y social para el país. En ésta se han librado guerras con otros países y con comunidades autóctonas que defienden su derecho a un hábitat natural, bajo principios culturales ancestrales.

El principal atractivo del lugar es que su totalidad es plana y en ocasiones tan áridas y húmedas que se hace imposible vivir allí. Podríamos asegurar que es una región virgen, excitante para exploradores con ganas de embarrarse las botas.

Huellas jesuitas

Construidas al inicio del siglo XVIII, estas edificaciones fueron el hogar de 3.000 indígenas guaraníes y delegaciones jesuitas que se encargaron de su evangelización y educación. Aunque fueron abandonadas cerca de dos siglos, tras su descubrimiento la Unesco las declaró Patrimonio de la Humanidad desde 1993.

Conocidas como antiguas misiones jesuitas Santísima Trinidad del Paraná constituyen un legado histórico, en sus escuelas y edificios se transcribieron las primeras escrituras en guaraní y se desarrollaron la agricultura y ganadería como fuentes abundantes de sustento.

Recorrer las ruinas es integrarse a un tiempo pasado, ingresar a casas que fueron escuelas, talleres y museos y que actualmente siguen narrando pasajes históricos que revelan parte de nuestra identidad latinoamericana.

Esperamos animarte y sembrar el gusanito de la curiosidad para que continúes explorando las maravillas que Paraguay tiene para ofrecerte.

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