Reto de los diez segundos en atletismo VIII: Maurice Greene

Maurice Greene ha sido un extraordinario velocista norteamericano, nacido en Kansas City el año 1974, y su trayectoria olímpica es relativamente modesta ya que solo participó en los Juegos Olímpicos (JO) de Sidney en el año 2000 donde mostró su calidad ganando la medalla de oro en 100m planos con tiempo de 9,87s, y en los JO de Atenas 2004 repitiendo el oro en 100m planos y medalla de plata en el relevo 4 x 100m.

Fue el primer velocista en bajar el registro de los 100m planos de 9,80s, al detener los cronómetros en 9,79s compitiendo en el IAAF World Challenge de Atenas en 1999. Este record mundial fue roto al poco tiempo, en el año 2002, por el también norteamericano Tim Montgomery, cuyo registro fue anulado por dopaje en la competencia. De esa manera, el record mundial perduró por casi diez años, hasta que el Jamaiquino Asafa Powell lo bajó a un increíble 9,72s, y aunque éste fue un registro válido para romper el record de Greene, Powell dio positivo a dopaje años más tarde.

Quizás el momento culminante de este atleta fue el Campeonato Mundial de Atletismo de Sevilla el año 1999, en el cual arribó como el hombre más rápido del mundo y no defraudó al ganar tres medallas de oro, el relevo 4 x 100m con el equipo norteamericano, además de medallas áureas de los 100m y 200m planos que lo convirtieron en el primer velocista en ganar estas dos competencias en un mismo campeonato mundial. Al llegar a Sevilla, el equipo norteamericano vivió un episodio anecdótico muy interesante con este atleta, que se resume de la siguiente manera:

• Greene llegó al aeropuerto de Sevilla y se dice que comenzó su entrenamiento en este mismo recinto cuando un ratero, quien reiteradamente cometía fechorías en este terminal de pasajeros, cometió el error de intentar robar un bolso de viaje a Larry Wade, otro atleta del equipo norteamericano, quien competía en la prueba de 110m con vallas.
• Greene estaba siendo entrevistado a su llegada a Sevilla cuando Wade descubrió al ratero y lo perseguía motivando a Greene a dejar plantados a los periodistas al salir corriendo en apoyo de su compañero de equipo.
• Por supuesto, rápidamente atraparon al ladrón quien merecía doble castigo, uno por ladrón y otro por estúpido al querer competir en velocidad con estos atletas.

Desafortunadamente, Maurice Greene fue un atleta perseguido por dolencias físicas que le impidieron participar en los JO de Pekín 2008 y, además, motivaron su retiro prematuro de las competencias de pista y campo. Sin embargo, después de 18 años de su hazaña, continúa siendo el séptimo velocista del mundo.