Arritmias: ritmos cardíacos anormales

Los ritmos cardíacos anormales o arritmias, son secuencias irregulares de latidos del corazón. Pueden ser muy rápidos o muy lentos, o conducidos por una vía eléctrica anormal a través del corazón. Los ritmos cardíacos difieren de una persona a otra y son factores clave el estado de salud, la edad y la condición física.

El corazón es un órgano muscular con cuatro cámaras, diseñado para trabajar eficientemente y continuamente durante toda la vida de una persona. Las paredes musculares de cada cámara se contraen en una secuencia regulada, bombeando sangre según lo requerido por el cuerpo y consumiendo la menor cantidad posible de energía en cada latido.

La contracción de las fibras musculares dentro del corazón es controlada por electricidad, la cual fluye a través del corazón de una manera precisa por diferentes vías y a velocidad regulada. La corriente eléctrica que comienza cada latido se origina en el marcapasos del corazón ubicado sobre su cámara superior derecha. La tasa a la cual el marcapasos descarga la corriente eléctrica determina el ritmo cardíaco. Este ritmo está influenciado por impulsos nerviosos y niveles de ciertas hormonas en el flujo sanguíneo.

En un adulto en reposo, el ritmo cardíaco usualmente está entre sesenta y cien latidos por minuto. En personas jóvenes puede ser un poco más bajo, especialmente los que están en buena forma física. El ritmo cardíaco generalmente varía en respuesta a ejercicios y a algunos estímulos como pueden ser sentir dolor o rabia. El ritmo cardíaco se considera anormal cuando es inapropiadamente rápido conocido como taquicardia, o lento conocido como bradicardia, o cuando es irregular, o cuando los impulsos eléctricos viajan por caminos anormales.