Las Cataratas del Niágara

Las caídas de agua en los ríos siempre tienen una belleza especial, unas de las más conocidas y visitadas en el mundo son las Cataratas del Niágara (Niagara Falls) en el río del mismo nombre, ubicadas al noreste de América del Norte y separan a Canadá de los Estados Unidos de América. Se encuentran a 236 msnm y su máxima altura de caída es alrededor de 64 metros, y aunque no son muy altas, son muy anchas y voluminosas ya que por allí pasa toda el agua de los grandes Lagos de Norteamérica. Además de su belleza, estas cataratas son fuente de energía y un lugar turístico que comparten las ciudades Cataratas del Niágara Nueva York y Cataratas del Niágara Ontario, las cuales están conectadas por tres puentes.

El uso de las cataratas como fuente de energía hidroeléctrica es bastante antiguo. En 1759, Daniel Joncairs por medio de un canal sobre las cataratas pudo suministrar energía a un aserradero de su propiedad. En el siglo XIX hubo varios desarrollos para suplir energía a diversas industrias y se contrató a la compañía Niagara Falls Hydraulic Power and Mining Company con el objeto de construir canales para la generación de electricidad, y hacia finales de ese siglo se construyeron grandes conductos subterráneos y turbinas generadoras de electricidad. Se estima que en la actualidad, cerca del 75% de la corriente del Río Niágara es desviada por cuatro túneles hacia las plantas hidroeléctricas Robert Moses Niagara Hydroelectric Power Station en USA y Sir Adam Beck Hydroelectric Power Station en Canadá.

Definitivamente, éste ha sido un lugar preferido por muchos turistas del mundo, en particular, los estadounidenses lo han utilizado para celebrar la luna de miel. Sin embargo, después del estreno de la película “Niagara” protagonizada por Marilyn Monroe la cantidad de turistas aumentó considerablemente. Además, las cataratas y sus alrededores han sido escenario para el rodaje parcial de películas como Superman II, La Novia de Chucky, Piratas del Caribe, Camille y Un Amor para Siempre.

Uno de los espectáculos especiales que ofrecen las Cataratas del Niágara es cuando ocurren crudos inviernos y sus aguas se congelan, quedando suspendidas como grandes estalactitas. Hay reportes de algunos congelamientos como los ocurridos en 1848 cuando quedaron totalmente congeladas con temperaturas de hasta -35°C, también en 1902, 1911, 1936, y la última ocurrió el 21 de enero del 2014 con temperaturas inferiores a -30°C. Congeladas o no, las Cataratas del Niágara son una belleza natural que debe ser visitada.