La Diosa Venus

En la Mitología Romana, Venus es la Diosa del Amor, la Belleza y la Fertilidad. La equiparan con Afrodita de la Mitología Griega, fue esposa de Vulcano, Dios del Fuego, y Julio César la adoptó como su protectora. Según Virgilio en la Eneida, Venus no fue tan cruel y sensual como Afrodita pero conservaba sus atributos y algunos símbolos como fue el caso de la manzana dorada de la discordia. Además, sus romances con Marte, el Dios de la Guerra en la Mitología Romana, dieron como fruto a Cupido, su heredero como Dios del Amor.

Venus, por su belleza y su desnudez porque siempre se le representó sin ropas exhibiendo sus bellas formas femeninas, fue un tema muy popular en las pinturas y esculturas renacentistas. Por ser Diosa de la Salud Sexual se aceptaba también cierto grado de belleza erótica en sus retratos, lo cual era muy atractivo para los artistas de la época, y con el tiempo, Venus representaba cualquier mujer desnuda en el arte posclásico, aún si se sabía que no se trataba de la diosa.

En relación al nacimiento de Venus se han escrito varios mitos, pero quizás el más aceptado sea el que refiere que una gigantesca concha era mecida por el Mar Mediterráneo, su vaivén la llevó hacia las costas de la Isla Citérea y al golpear la tierra la concha se abrió y de su interior surgió la Diosa Venus. Esta versión ha sido representada por varios artistas quienes muestran a una bella mujer emergiendo de una concha marina, como es el caso del famoso cuadro “El Nacimiento de Venus” de Sandro Botticelli.

Esta diosa le ha dado su nombre al planeta Venus, segundo planeta del sistema solar, que rige el amor.