Distracción, una estrategia socialista

El paso del tiempo es implacable, cada minuto, cada segundo que transcurre pasa y no regresa, lo que se ha podido hacer en ese tiempo ya no es posible. Por eso, en muchas ocasiones escuchamos decir a las personas que el tiempo es oro, que no se debe dejar pasar el tiempo sin realizar algo de provecho para la persona, o para una comunidad, o para el mundo.

Muchos utilizan una agenda para distribuir las labores diarias y procurar ser lo más eficientes posible en la utilización del tiempo, y se apegan a ello en sus actividades cotidianas. En oportunidades esas agendas se ven modificadas y van quedando espacios ociosos, debido a falta de puntualidad de otras personas con las que se interactúa. 

En la actualidad, en Venezuela, para la mayor parte de sus ciudadanos, es imposible hacer un buen uso del tiempo. Muchos opinan que el régimen del socialismo del siglo XXI que ha gobernado al país durante los pasados veinte años, ha desarrollado una estrategia para distraer a las personas, y de esta manera no tengan suficiente tiempo tanto para ser productivos, como para protestar por la gran cantidad de limitaciones que se tiene en los servicios públicos, como los casos de suministro de electricidad, agua potable, gas doméstico y recolección de desechos; hospitales bien equipados y con una adecuada atención médica; escuelas y liceos, universidades y otros institutos de educación, bien equipados y con un buen nivel de enseñanza; seguridad personal y jurídica; vías de comunicación bien mantenidas; economía que permita a los empresarios realizar las inversiones necesarias para la producción de bienes para las comunidades, sin control de cambio en el manejo de las divisas; reclamar un adecuado uso de la renta petrolera; etc.

Esta estrategia de distracción emplea las más increíbles modalidades de pérdida de tiempo. Por ejemplo, usted no puede retirar de sus cuentas bancarias, de su dinero, más de Bs 3.000 por día, lo cual significa que para reunir Bs 30.000 tiene que ir al banco diez veces. Como todo el mundo tiene que hacer lo mismo, las entidades bancarias permanecen congestionadas la mayor parte del tiempo y a usted le toma al menos dos horas hacer su retiro diario del banco. Casi todos los cajeros automáticos están fuera de servicio por lo que usted no puede evitar enfrentar la taquilla del banco. Para que tengamos idea de lo que son Bs 30.000, pueden alcanzar para la compra de unos pocos rollos de papel sanitario, o un cartón de huevos. O sea, para poder comprar eso usted tiene que pasar dos horas diarias en la cola de un banco, durante diez días.

Así como ese ejemplo hay muchos en el diario quehacer de los venezolanos. En la Venezuela por venir, se eliminarán todos esos obstáculos para que la gente pueda utilizar mejor el tiempo, dedicados a ser productivos.