Precauciones al remover un cielo raso acústico

Si en su casa tiene un cielo raso acústico y quiere eliminarlo porque recolecta telas de arañas, polvo, o simplemente está fuera de época y ya no lo quiere, tiene que considerar que la mayoría de los cielo rasos construidos antes de 1970 pueden contener asbesto, que es una fibra mineral considerada contaminante, pudiendo causar cáncer y otros desórdenes pulmonares.

No es fácil concluir si su techo tiene asbesto solamente al mirarlo, por lo tanto, debe chequear formalmente la presencia de este mineral. Aún si el chequeo es negativo es bueno tomar ciertas precauciones para su remoción:

-Use las máscaras antipolvo correspondientes ya que el asbesto fácilmente se transporta por el aire y la inhalación de estas fibras puede llevarlas a los pulmones causando daños y eventualmente cáncer.

-Protéjase ojos y piel ya que la exposición a estas fibras puede ser causa de síntomas desagradables y hasta producir verrugas.

-Avise oportunamente a todos los habitantes de la casa para que eviten exponerse a las fibras en el aire. Además, proteja muebles y pisos para que no recojan las fibras de asbesto.

Luego de considerar esas precauciones comienza el proceso de remoción, que por lo delicado de la operación es generalmente realizado por empresas especializadas. Lo primero que debe hacerse, es humedecer la superficie del cielo raso para que las fibras de asbesto que contiene no pasen a flotar en el aire y causen daños a las personas. Esto es un paso importante, ya que las fibras de asbesto son tan pequeñas que se hacen imperceptibles al ojo humano. Por supuesto, tome las precauciones antes de humedecer su cielo raso para evitar daños a sus muebles y otros enseres.